Muchas veces este trabajo es estresante. Si no, vean lo que le sucedió a un antiguo compañero mío.
Había un pleno en Marbella, de esos calentitos donde Jesús Gil (D.E.P.) y la oposición se ponían a parir.
Aprovechando que un par de compañeros iban a ir hasta Marbella para cubrir el pleno, yo aproveche para desplazarme también y entrevistar a jugadores del Atl. Marbella, que por aquel entonces estaba sumido en un caos tanto deportivo como económico.
Aquel pleno se alargó más de la cuenta, y aquel compañero por su afán de tener la noticia, apuró tanto la hora de marcharse del pleno que literalmente tuvo que ir haciendo Rally para recorrer en apenas 10 minutos la distancia entre Marbella y Estepona (unos 25 km, con semaforos y atascos) y poder llegar a tiempo.
Catorce horas y quince minutos: esa era la hora fijada para el comienzo de la emisión local. Recuerdo que en la puerta de la emisora, comenzó a sonar la sintonía del inicio del informativo. Dejó el coche en medio de la calle, se bajo, y se fue corriendo para hacer el informativo. Otro compañero tuvo que aparcar la unidad movil, pero aquel informativo salió a su hora.
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