Todos pudimos ver este pasado fin de semana, como en el Circuito de Jerez S.M. El Rey disfrutaba de una de sus pasiones, la moto. Don Juan Carlos apareció desde la parrilla de salida de 125 cc hasta la conclusión de Moto GP. Todo un ejemplo a seguir.
Sin embargo, ves otras competiciones, en donde llega el secretario del secretario del político de turno, y justo 10 minutos antes de finalizar dicha competición llama a su "jefe" para que venga a entregar el trofeo.
Eso es peligroso, y es peligroso porque el político de turno no entiende de deporte, y claro, luego pasa lo que pasa; que se mete la pata bien metida.
Ahora, la Costa del Sol, también denominada "Costa del Golf" renuncia a la Solheim Cup simplemente porque el político de turno dice "no tener posibilidades".
La Solheim Cup es la Ryder Cup pero en femenino. Y hablando de la Ryder Cup, todo un Consejero de Turismo y Deportes de la Junta de Andalucía sale diciendo que "no cree que a Madrid le concedan la Ryder del 2018, que no tiene posibilidades"
A lo mejor, este político no se ha dado cuenta de que en Andalucía se concentra la mayor parte de campos de golf de Europa; y si Madrid albergase una Ryder Cup, la mayoría de aficionados pasarían por Andalucía.
Este mismo político piensa que con apoyar el Open de Andalucía y organizar el Andalucía Valderrama Masters ya el golf en nuestra comunidad está más que cubierto.
Este político no sabe, o lo que es aún peor, no quiere saber que en Andalucía se va a disputar el segundo torneo más importante de los que se celebran en Europa, como es el Volvo Mundial Match Play.
Esa es la manera y forma de agradecer a un patrocinador el haber apostado durante más de 20 años por Andalucía, exportándola a todos los rincones del mundo. Luego nos lamentaremos de que los grandes inversores ya no están interesados en el famoso turismo de "Sol y Playa".